Juan Silva: Más de 30 años de perseverancia en la danza nacionalista (video)

Ser bailarín no es una tarea fácil, los bailarines son artistas y atletas, que deben trabajar duro, perseverar y sobrepasar las limitaciones y adversidades que se presentan a lo largo del camino. Un ejemplo de ello, es Juan Silva, quien desde niño se visualizó formando parte del mundo de la danza folclórica, y pese o no haberla tenido fácil, hoy en día cuenta con una amplia trayectoria que lo convierten en referencia de este arte en la región y a nivel nacional.

Los inicios de Silva se remontan hace más de 30 años, cuando estando en el colegio participaba en actos culturales. Explica que sus primeros pasos los dio gracias a su maestra de preescolar, Inés Longa, directora de Danzas Naiguatá, quien vio talento en él.

Sin embargo, no fue hasta que Silva vio un programa de televisión llamado “Yolanda y la Danza Nacionalista”, que nació su verdadero amor por esta manifestación cultural, y comenzó su lucha para tratar de llegar a formar parte de este reconocido cuerpo de baile.

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“Tuve que bailar escondido”

Sus inicios no fueron fáciles, mientras continuaba sus estudios, con muchos sacrificios, continuó bailando para cumplir sus sueños con Danzas Naiguatá de forma clandestina, en vista de que su padre no aprobaba su inclinación por el baile.

“Antes las cosas eran más difíciles con los padres, ya que eran más estrictos y siempre nos inculcan formarnos como abogado, médico, ingeniero u otra carrera a fin, pero a mí no me gustaba nada de eso, por eso nunca tuve ese apoyo de su parte”.

Además, se vio en la obligación de hacer un curso de peluquería, al tiempo que estaba estudiando en el bachillerato para poder trabajar y costear sus vestuarios, zapatos y otros requerimientos de la danza.

Una vez que culminó el bachillerato, se fue a vivir a Puerto Cabello, lugar de donde proviene su familia materna, allí le planteó a su madre que quería estudiar danza, y está afortunadamente lo apoyó y de allí en adelante le brindó la ayuda necesaria y comenzó a acompañarlo a sus presentaciones.
“Sin embargo, en Puerto Cabello, para la fecha, no había esa cultura de danza como la había en Caracas, fue allí cuando decidí viajar todos los días de Puerto Cabello a Maracay, a la escuela de formación artística de expresión criolla, con mi profesor William Palencia”.

Borburata

Luego de formarse, tuvo la oportunidad de formar su propia agrupación en Puerto Cabello, con el nombre de Danzas Borburata. La cual, le permitió enseñar el arte de la danza a los niños de su comunidad en Carabobo, y con la que cosechó muchos éxitos.

“Viajamos por todo el país representando a Carabobo y en un festival nacional, ganamos una competencia, y allí conozco a Yolanda Moreno, quien en esa oportunidad me dice que estaba invitado a audicionar para su danza”.

2002: La audición

No fue hasta 2002 que hubo una audición en la que puedo quedar seleccionado para cumplir su sueño de formar parte de las filas de Danzas Venezuela, donde continúo su formación como bailarín enfocándose en seguir creciendo y aprendiendo.

En Danzas Venezuela, además de ser bailarín, tuvo la responsabilidad de ser coreógrafo durante varios años, gracias a su mérito y compromiso, por lo que trató de mantenerse a la altura de dicho título.

Asimismo, cumplió otro de sus más grandes sueños que fue presentarse en el espectáculo del Miss Venezuela, “Para todo bailarín, vivir la experiencia de presentarse en el primer certamen del país, es lo máximo, me encantaría que cada uno de mis muchachos pueda vivir esa emoción”.

“Agradecido siempre con la señora Yolanda Moreno, la considero como mi madre, es una persona que quiero y admiro muchísimo, pues fue quien me dio la oportunidad de cultivarme como artista, me enseñó a querer mi país, trabajar junto ella fue un gran logro para mí”.

Juan Silva también detalla que significa mucho para él mantenerse hoy en día junto a Yolanda Moreno, “ella ya tiene 83 años de vida y sigue con esa energía que la caracteriza, y con esa voluntad de querer salir adelante, yo creo que ella sabe que cuenta conmigo para lo que sea”.

Urge apoyo para el talento regional y para la danza

Para Silva, quien ve a la danza como “la síntesis de todas las artes”, considera que actualmente se necesita de mucho apoyo, especialmente para construir un espacio que sirva para las prácticas y más importante aún, para las presentaciones del talento regional.

Por esta razón, nació hace ya casi dos años, la fundación Danza Nacionalista La Guaira, como una forma de “formar, difundir y promover el arte y la cultura a través de la danza en el estado”.

Sin embargo, han sido evidentes los obstáculos que se les presenta para ofrecer un buen show de calidad, ya que son necesarios los recursos para los vestuarios y escenografías de calidad.

Aun así “yo confío en que con el trabajo que estamos haciendo nosotros y todas las agrupaciones de danza y artísticas del estado en algún momento se recogerán sus frutos”.

“Quiero que La Guaira se proyecte como un emporio artístico”

Silva considera que la mejor forma de aportar algo al país es formando a los jóvenes, no solo en el baile, sino también inculcándoles el sentir venezolano. Pues a su juicio, son ellos quienes tienen en sus manos todas las herramientas para lograr construir un futuro mejor para el país.

Por eso espera que su legado, sea ayudar a propiciar que La Guaira sea un emporio artístico, donde se reconozcan el estudio y conocimientos de los bailarines.

Para finalizar, invitó a todo el público guaireño a no perderse el próximo 19 de agosto de este 2023, un gran evento de celebración por el segundo aniversario de Danzas Nacionalistas La Guaira, que se realizará en la Meseta de Mamo, en Catia La Mar, a las 2 de la tarde.

El espectáculo titulado “Venezuela Siempre Venezuela”, contará con muchas sorpresas por parte de todos los bailarines, desde los más chiquititos que se están formando en la escuela de danza, hasta los más grandes que ya forman parte de la compañía.

Por: Nainerys Mayora